Un contencioso sobre la propiedad de los inmuebles del siglo XIX entre el Ayuntamiento y Adif frenó su rehabilitación, prevista por la entidad ferroviaria
Casi tres años después de que se derribara la marquesina de la estación de Renfe, sólo quedan dos edificios del siglo XIX como testigos del pasado. Aunque la verdad es que parece que nadie se acuerda de ellos, tapados como están por grandes lonas con su fachada dibujada en ellas. El olvido que sufren estos dos inmuebles es notable y su degradación, aunque no es apreciable a simple vista, comienza a notarse a poco que se mire por algún agujero en las lonas.
El problema es que estos dos pequeños bloques, construidos en 1863 por Antonio Arriate, llevan un año durmiendo en un limbo administrativo y la prevista rehabilitación, con proyecto y presupuesto a cargo del ente Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), sin posibilidad de ejecutarse.
El origen de esta paralización está en una disputa sobre la propiedad entre el Ayuntamiento de Málaga y el Adif, ya que ambos reclamaban sus derechos sobre los dos inmuebles que formaban la fachada de la antigua estación. Estas diferencias terminaron en los tribunales, que determinaron una sentencia favorable a los intereses municipales. A partir de ahí, el proyecto del Adif se quedó en suspenso. Ha pasado más de un año desde la última vez que se trató el tema para intentar llegar a una solución y, desde entonces, los edificios han pasado a un segundo plano.
"No podemos invertir en un edificio que no es de nuestra propiedad", señala un portavoz de la entidad ferroviaria, quien explica que tienen el proyecto redactado y el dinero liberado para este fin "si el Ayuntamiento quiere llegar a un acuerdo sobre los edificios". Están dispuestos a llevarlo adelante, con idea de buscarle también un uso vinculado a la estación o como equipamiento, pero con un acuerdo previo sobre la propiedad.
El Ayuntamiento afirma que quiere que se rehabilite y están dispuestos a que el Adif lo ejecute, pero no se ha movido nada en meses y los edificios siguen degradándose.
El último problema detectado es que en uno de ellos han abierto un hueco en la lona los suficientemente grande para que entren vagabundos al edificio, lo que acelera la degradación del inmueble. Esta ´okupación´ se produce pese a que cuentan con una doble lona de protección, la segunda más pegada a la fachada. En el situado a la derecha, ésta se ha desprendido y deja suficiente hueco para que pasen personas al interior a dormir y dejar sus cosas. Además, permite comprobar de primera mano el estado de abandono que sufre el inmueble desde hace tres años. Un portavoz del Adif señaló que, aunque los edificios no son suyos, reparan la lona con cierta frecuencia "porque es la primera imagen que se llevan los viajeros que llegan a Málaga".
Los edificios son gemelos y tenían como función organizar la entrada y la salida a la estación en el diseño original del siglo XIX. Es el único vestigio que queda de la terminal antigua, salvo algunos restos de la marquesina en un almacén municipal.
MIGUEL FERRARY. La Opinión de MÁLAGA 15-11-08
1 comentario:
Como se suele decir, unos por otros y la casa sin barrer, nadie se quiere hacer cargo de los viejos edificios que en realidad encierran mucha historia
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